Impaciente espero tu llamada, con ansias locas de escuchar tu voz; esa voz que me estremece toda que con oírla tiemblo de pasión.
Impaciente espero tus palabras, que me dirán la hora exacta... para al fin vernos y amarnos sin control, en donde siempre nos encontramos tú y yo.
Cuando al fin se escucha el ring, ring, del teléfono, de un salto casi se me sale el corazón, el frio acostumbrado se apodera de mi cuerpo y en mis piernas un delicioso temblor; entonces me dices lo esperado... que estás loco por tenerme entre tus brazos, que te mueres de ganas de estar a mi lado, que llegue pronto por favor! en ese momento... yo me olvido de todos y de todo, en mi mente solo importas tu; salgo muy aprisa y con mucho cuidado, no quiero que nada se interponga entre los dos; entonces podremos disfrutar nuestro tiempo, amarnos con gran locura y pasión, que ya de regreso cada cual en su casa, nos reiremos callados, recordando nuestro secreto amor.
Enviado por: Anónimo
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